Por José Benegas,
Cinco venezolanos recién exiliados en la Argentina, con la ayuda de un
argentino, tuvieron la iniciativa de hacer oír su voz por la libertad de su
país en el reciente partido de fútbol entre los seleccionados de ambos países
por las eliminatorias del mundial Rusia 2018, celebrado en el estadio
Monumental de Buenos Aires. A una bandera de Venezuela de 24 metros de largo,
le escribieron la consigna "Libertad a Venezuela" para exhibirla
frente a las cámaras de televisión, pero, cuando quisieron ingresar, se encontraron
con un impedimento. La policía no los dejaba llevar a cabo su propósito, debido
a una reglamentación que prohíbe el uso de banderas superiores a un metro por
dos en los estadios. Faltaban dos horas y media para el inicio del partido,
pero el grupo no quería darse por vencido.
Entonces, se les ocurrió recurrir a la misma estrategia que
utiliza el streaming en internet para hacer navegar enormes archivos de video
por la red: buscaron un lugar donde comprar elementos para cortarla y en una
calle cercana dividieron la bandera en 24 pedazos, de modo de que cada uno
cumpliera con la reglamentación. De esta manera no tuvieron problemas para
pasar los controles.
Una vez adentro, les faltaban más manos para llevar a cabo el plan, dado
que eran 6 y las partes de la bandera, 24. Enseguida consiguieron otros 18
venezolanos voluntarios que aceptaron colaborar y, además, ponerse a ensayar
cómo levantarlas de una manera precisa para que se viera lo más parecida
posible a la original. Así fue que, pese a todo, consiguieron hacer llegar su
mensaje a millones de personas, como se ve en la foto.
No es que fueran expertos en tecnología, pero reprodujeron el mecanismo
que permite que veamos videos de enorme peso, que viajan por internet divididos
en miles de pedacitos para superar el límite de capacidad de los distintos
servidores y anchos de banda que se encuentran en el camino que recorren, para
ser reconstruidos en el destino.
Esta vez no se trataba de restricciones digitales, sino de absurdas
reglamentaciones, que no pudieron con el ingenio del corazón de estos
venezolanos: El Chino, Eduardo, Henry, Bárbara y Alex, y un argentino, Gustavo,
que aman la libertad.
Tomado de:
No hay comentarios:
Publicar un comentario