EL TIEMPO 14 de diciembre de 2017
Locuaz
y risueño, Wilmer Hernández, de 23 años, dejó su natal Venezuela para
embarcarse en este camino de sueños e incertidumbres que es la migración. Hace
más de 10 meses se estableció en Colombia. Junto con su padre y su tío, hace
parte de un grupo de mariachis y vende arepas venezolanas para ayudar a su
madre y sus nueve hermanos, que aún residen en el vecino país.
Oriundo
de Barquisimeto, estado Lara, Wilmer hace parte de los miles de venezolanos que
han ingresado a Colombia en busca de superar la precariedad que se vive en
Venezuela, para conseguir tranquilidad, seguridad y futuro.
Según
Migración Colombia, hasta el 26 de octubre de este año han ingresado al país
470.000 ciudadanos venezolanos. Esta entrada se hizo principalmente por los
puestos de Control Migratorio ubicados en Cúcuta, Paraguachón y Bogotá.
Las
razones por las que los venezolanos deciden emigrar parecen similares en épocas
en que la crisis económica azota duramente el país. Luego de cinco aumentos de
salario mínimo en lo que va del año y del anuncio de hiperinflación, el acceso
a los alimentos, medicamentos, incluso el acceso al dinero mismo son un
laberinto cada vez más complejo.
Conozca
la historia de Wilmer, los motivos por los que decidió dejar Venezuela, las
angustias y los triunfos de la experiencia de migrar y lo que tiene por
decirles a los colombianos.
La
investigación de este podcast estuvo a cargo de la periodista Ana María Díaz,
de la redacción Internacional, con la edición de Valeria Murcia y la dirección
de Carlos Solano.
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