RFI 17 de abril de 2018
Tras el anuncio del presidente Sebastián
Piñera de otorgar un permiso temporal de residencia en Chile para los
venezolanos, los consulados de Caracas y Puerto Ordaz se desbordaron este
lunes. Una hora después de la atención al público, cerca de 400 personas
formaron cola para informarse e iniciar los trámites.
El 8
de abril de 2018 será una fecha recodada por miles de venezolanos. Ese día el
presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció “poner orden a la creciente
migración venezolana”. Y, para lograrlo, anunció la creación de un permiso de
residencia temporal para los venezolanos que deseen trabajar durante doce
meses. Si pueden establecerse y demostrar un aporte a la sociedad chilena,
podrán renovarlo.
Esta
visa, también llamada ‘Visado de Responsabilidad Democrática’, se solicita
desde el 16 de abril exclusivamente en los consulados chilenos de Caracas y
Puerto Ordaz. Por lo que cerca de 400 abarrotaron las oficinas en pocas horas
para informarse. Basta presentar un certificado de antecedente de penales, una
fotografía, un pasaporte vigente y esperar una cita para obtener la respuesta
final. Tras el anuncio, la expectativa crece exponencialmente, pues varios
solicitantes se presentan en los consulados con el pasaje rumbo a Santiago en
la mano. Los venezolanos ahora tendrán una nueva opción migratoria después de
Colombia, Perú, Brasil, Ecuador y España.
Pero
más allá del gesto con sus vecinos del norte, el mandatario busca reformar el
sistema de ley sobre Migración y Extranjería. Según datos del Estado chileno,
el país alberga más de 950.000 extranjeros de los cuales un tercio están en
situación irregular. La última gran ola migratoria en Chile generó el flujo
mayoritario de ciudadanos haitianos y venezolanos y la administración de Piñera
desea reorganizar las reglas de migración a través de un Decreto impulsado por
el Poder Ejecutivo. En ese sentido, el Visado de Responsabilidad Democrática es
un componente más dentro de las nuevas visas.
En la
propuesta de Piñera, se propone entregar visas de emprendimiento temporal para
trabajar, visas de orientación internacional para ciudadanos altamente
calificados y profesionales formados en el extranjero y visas de turismo
exigidas a todos los ciudadanos haitianos con plazo de estadía de 30 días.
Todas deberán pedirse en el extranjero.
Sin
embargo, en diálogo con Radio Francia Internacional, el presidente de la
Coordinadora Nacional de Migrantes en Chile, Rodolfo Noriega, indica que la
medida busca contener el paso de los haitianos y venezolanos. “Las visas deben
darse a través de Decreto Ley y con etiquetas. Todas las visas con
denominaciones tienen fin político. Por ejemplo, decir que hay una visa
‘democrática’ no es nada nuevo. Esta es
una visa de carácter humanitario que puede entregar cualquier gobierno”,
apunta.
A su
juicio, los demandantes de estas visas “recibirán un portazo en la cara” porque
el gobierno prevé tramitarlas en consulados donde no hay personal suficiente
para una alta demanda. Noriega indica por ejemplo que el Consulado de Caracas y
de Ordaz no atiende al público y en Haití apenas diez funcionarios resuelven
las centenas de solicitudes.
Otra
arista de esta reforma busca distanciarse de la Ley Migratoria chilena otorgada
en 1975 por el gobierno de Augusto Pinochet.
Esta evitaba la migración de comunistas o socialistas extranjeros y los
principios de la ley migratoria de 1953 que privilegiaba visados a ciudadanos
europeos con el objetivo de “mejorar la raza”.
“Ni
Michelle Bachelet ni Sebastián Piñera han logrado establecer una ley migratoria
que se desmarque del pasado, pues todavía existe rechazo de visados por
razones ideológicas”, sentencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario