El Diario 10 de septiembre de 2018
Una de las peores crisis migratorias en la
historia de Sudamérica trajo a nuestras tierras a cientos de Venezolanos que
buscan una vida de paz y trabajo.
Tal el
caso de Dulce Paredes, una joven odontóloga que llegó a nuestra ciudad en busca
de un mejor futuro para sus hijos y ahora enfrenta la necesidad de trabajo.
Dulce
Paredes tiene 34 años, un título de odontóloga ha trabajado en distintos
sectores administrativos, es una de las tantas venezolanas que ha escapado del
holocausto contemporáneo de Venezuela, ese país que brillo tanto hace muchos
atrás y que hoy está en ruinas.
Consultada por la triste actualidad de su país de origen, Dulce recordó con tristeza la cruda realidad venezolana que la obligó a emigrar, “tuvimos que vender todo para juntar unos pocos dólares, vendimos la casa y el auto, esperé a que mi hija mayor terminase la escuela y con un embarazo avanzado me decidí a partir hacia Argentina puesto que en mi país es muy difícil recibir atención médica ante la falta de insumos, he visto casos de madres con el feto muerto en su vientre por no poder hacerse una cirugía para sacarlo, acá ya vivía mi hermano y es quien me ha ayudado entre otras personas a establecerme con mi familia”.
Consultada por la triste actualidad de su país de origen, Dulce recordó con tristeza la cruda realidad venezolana que la obligó a emigrar, “tuvimos que vender todo para juntar unos pocos dólares, vendimos la casa y el auto, esperé a que mi hija mayor terminase la escuela y con un embarazo avanzado me decidí a partir hacia Argentina puesto que en mi país es muy difícil recibir atención médica ante la falta de insumos, he visto casos de madres con el feto muerto en su vientre por no poder hacerse una cirugía para sacarlo, acá ya vivía mi hermano y es quien me ha ayudado entre otras personas a establecerme con mi familia”.
La
nueva vecina está sorprendida por la calidez del pueblo argentino a quienes
agradece su ayuda, “he recibido de mis vecinos mucha ayuda sobre todo en ayuda
para su pequeño hijo que nació en argentina a pocos días de su llegada al país.
Ahora necesito trabajar y para ello me anoté en varios lugares, debo conseguir
un trabajo para mantener a la familia hasta tanto realice los trámites
necesarios para poder ejercer mi profesión de odontóloga”, comentó Paredes.
“Sé que los tramites van a demorar mucho tiempo, y mientras tanto quiero ayudar a mi marido que afortunadamente pudo conseguir un empleo. Podría ser empleada doméstica, mesera y hasta planchar ropa”, comentó la joven.
“Sé que los tramites van a demorar mucho tiempo, y mientras tanto quiero ayudar a mi marido que afortunadamente pudo conseguir un empleo. Podría ser empleada doméstica, mesera y hasta planchar ropa”, comentó la joven.
Cifras
Desde
enero se radicaron en la Argentina 25.445 venezolanos (25% del total de
radicaciones en el país), 24.429 paraguayos (24%), 18.827 bolivianos (19%),
8889 peruanos (9%), 8063 colombianos (8%) y 14.951 de otros países (15%). Del
universo de más de 25 mil venezolanos llegados este año al país, a un 22.038 se
les otorgó una radicación temporaria y a 3.407 la permanente.
En los
últimos dos años y medio, unos 530.000 venezolanos se radicaron en la
Argentina. De ese universo, el 83% se estableció en la Capital Federal y sus
alrededores.
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